Tres médicos del Hospital Universitario de Maracaibo señalados de dejarle una pinza quirúrgica en el cuerpo a un paciente tras una cirugía, fueron capturados por orden de la Fiscalía venezolana.

Se les imputaron cargos de mala praxis científica y las autoridades dijeron que responden a los nombres de Luis Gómez, Gerardo Núñez y Evert Colina.

La víctima de este curioso y lamentable episodio hospitalario fue identificada como Iván Chávez, de 59 años, empleado del Banco de Sangre de Maracaibo.

La historia la narró para medios del vecino país Isamar Chávez, hija del paciente afectado.

En horas del mediodía del domingo 20 de marzo, a Iván lo ingresaron al Hospital Universitario de Maracaibo debido a una diverticulitis inflamatoria, por lo que fue intervenido quirúrgicamente.

La operación resultó exitosa, le dijeron los médicos a Isamar, salvo algunos problemas de hipertensión que lograron estabilizar.

Agregó que lo remitieron directamente ‘a piso’, y que los médicos solo necesitaban que el paciente evacuara para completar el diagnóstico de una operación exitosa.

Sin embargo, pasaron los días e Iván Chávez nunca logró evacuar, además presentaba dolores abdominales fuertes del lado izquierdo, y se le imposibilitaba comer porque sentía ahogos.

Dado el panorama nada alentador del paciente, en horas de la mañana del jueves 24 de marzo los médicos deciden practicarle un examen de rayos x en el abdomen para determinar qué aquejaba al paciente.

Para sorpresa y confusión de la familia, el examen a Chávez mostraba una tijera o pinza quirúrgica que había sido dejada en su estómago el día de la intervención, la cual era la causa del malestar que ya lo tenía en estado crítico.

El paciente fue sometido entonces a una nueva intervención de emergencia para retirar el utensilio quirúrgico abandonado en su estómago, pero ya la pieza había causado un profundo deterioro que provocó su muerte.

La familia Chávez entabló de inmediato la denuncia que condujo a la captura de los tres médicos que intervinieron directamente en la operación.

Los profesionales aún no han rendido declaración sobre la situación a fin de determinar por qué se dio este hecho tan grave que le costó la vida al paciente.